Carlos Alcaraz se consagró en Wimbledon, el primero en “la capital del tenis” de su carrera deportiva. Pero lo hace más especial haberlo conseguido frente a Novak Djokovic, el siete veces campeón (1-6, 7-6 (6), 6-1, 3-6 y 6-4). Apenas el segundo Grand Slam ganado en la carrera de Alcaraz.
Djokovic empezó la final como la acabó, hincando la rodilla. En el primer juego, se cayó al suelo, una predicción del final del encuentro, pero arrancó dando un golpe de autoridad, pues barrió su patio particular en un primer set en el que demostró su experiencia, el segundo set se fue a tie break llevándoselo Alcaraz a manera de presagio, para la tercera manga el español fue contundente venciendo 6-1, Nole se repuso llevándose el cuarto 6-3, y en el quinto llegó la gloria para el veinteañero venciendo 6-4.
Alcaraz, 16 años más joven que el serbio, metió a Djokovic en su juego por grandes lapsos, su atrevimiento le dio para llevar el juego al quinto set en un juego que se prolongó por cuatro horas y media. Con ello Carlos se convirtió en el quinto español en la historia en ganar Wimbledon, junto a Manolo Santana, Conchita Martínez, Rafael Nadal y Garbiñe Muguruza.
Con este triunfo en All England, el murciano escribe su nombre junto al de los más grandes que han ganado el tercer Grand Slam del año, demostrando que en su actualidad está en ese nivel, pese a tratarse de un choque generacional ante Nole.
Djokovic empezó la final como la acabó, hincando la rodilla. En el primer juego, se cayó al suelo, una predicción del final del encuentro, pero no de lo que pasaría a continuación, porque el serbio barrió su patio particular en un primer set que hizo exhibición de su vasta experiencia aquí. Con Alcaraz nervioso, Djokovic se puso a pasar bolas desde el fondo, a no fallar, a desesperar al español, sobrecogido por el escenario.
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